Explicado de manera muy sencilla, la ortoqueratología es un tratamiento que utiliza lentes de contacto durante las horas de sueño, que permite a los pacientes ver bien a lo largo del día.
Más sencillo todavía: te pones unas lentillas mientras duermes y ves bien durante el día.
Técnicamente, la ortoqueratología consiste en la adaptación de unas lentes de contacto personalizadas, que modelan la córnea durante la noche, compensan la graduación y permiten ver bien durante el día. Las lentes se diseñan a partir de la topografía corneal de cada paciente, a modo de molde.
Es una técnica segura, no invasiva, indolora y reversible, usada desde hace más de 20 años, que se beneficia constantemente de importantes innovaciones tanto en el diseño como en los materiales de las lentes. El paciente puede dejar de llevarlas en cualquier momento y elegir otro método de corrección.
Por tanto, es importante entender que la ortoqueratología corrige los defectos de refracción de manera provisional; es decir, si dejamos de utilizar las lentes por la noche, volveremos a la graduación inicial.