Unidades diagnósticas
La degeneración macular es una lesión o descomposición de la mácula. La mácula es una pequeña zona de la retina situada en la parte posterior del ojo, que le permite ver detalles finos con claridad y realizar actividades tales como leer o conducir un vehículo. Cuando la mácula no funciona correctamente, su visión central puede verse afectada por la formación de imágenes borrosas, con áreas oscuras o deformadas. La degeneración macular afecta su capacidad de ver objetos cercanos y lejanos. Puede hacer que algunas actividades (como enhebrar una aguja o leer) sean difíciles o imposibles.
Si bien la degeneración macular reduce la visión de la parte central de la retina, no afecta la visión lateral o periférica del ojo. Por ejemplo, usted puede ver el contorno del reloj, pero no puede precisar qué hora es.
La degeneración macular por si sola no conduce a la ceguera total. Aún en los casos más avanzados, las personas continúan teniendo alguna visión útil y frecuentemente pueden cuidar de sí mismas. En muchos casos, el impacto de la degeneración macular en la visión puede ser mínimo.
Muchas personas mayores desarrollan degeneración macular como parte del proceso de envejecimiento natural del organismo. Existen diferentes clases de problemas maculares, pero el más común es la DMAE. Se desconoce la causa precisa por la cual se desarrolla. Ningún tratamiento ha sido eficaz en forma constante. La degeneración macular es la causa principal de pérdida severa de la visión en personas mayores de 65 años.
Los dos tipos de DMAE, son:
Seca (atrófica).
La mayoría de las personas presentan la forma “seca” de la DMAE. Es provocada por el avance de la edad y por el adelgazamiento de los tejidos de la mácula. Habitualmente, la pérdida de la visión es gradual.
La forma “húmeda” de la DMAE cubre aproximadamente el 10% de todos los casos. Se produce cuando se forman vasos sanguíneos anormales por debajo de la retina, en la parte posterior del ojo. Estos nuevos vasos sanguíneos permiten la filtración de líquido o sangre y producen una visión central borrosa. La pérdida de la visión puede ser rápida y severa.
La degeneración macular puede causar diferentes síntomas en distintas personas. Esta afección puede ser prácticamente imperceptible en sus comienzos. A veces sólo uno de los ojos pierde la visión, mientras el otro continúa viendo bien durante muchos años. Pero cuando afecta a ambos ojos, la pérdida de la visión central puede percibirse más rápidamente.
A continuación se enumeran varias formas en que se detecta la pérdida de la visión:
Las palabras escritas en una página aparecen borrosas.
Aparece un área oscura o vacía en el centro de la visión.
Las líneas rectas aparecen deformadas.
Muchas personas no perciben la afección macular hasta que la visión borrosa se torna obvia. Su oftalmólogo (médico de los ojos) puede detectar DMAE en sus etapas iniciales, durante un examen ocular que incluya lo siguiente:
Una simple prueba de la visión en la cual usted mira una gráfica que se parece al papel cuadriculado (cuadrícula de Amsler).
Observando la mácula con un oftalmoscopio.
Mediante la práctica de un Scanner de retina OCT, que nos da imágenes de cortes anatómicos de la mácula.
En ocasiones se toman fotografías especiales del ojo con fluoresceína llamadas angiogramas, con el fin de encontrar vasos sanguíneos anormales detrás de la retina. Se inyecta fluoresceína en una vena del brazo y luego se fotografía el ojo cuando el colorante pasa a través de los vasos sanguíneos de la parte posterior del ojo.
Los depósitos que se concentran por debajo de la retina, llamados “drusen”, son una causa común de DMAE. Estos depósitos no causan pérdida de la visión por sí solos, pero su incremento en número puede ser una indicación de riesgo de desarrollar DMAE avanzada. Las personas con riesgo de desarrollar DMAE avanzada tienen una cantidad significativa de “drusen”, DMAE seca prominente o vasos sanguíneos anormales detrás de la mácula en un ojo (DMAE húmeda).
Suplementos nutritivos:
Aunque las causas precisas de DMAE no son completamente conocidas, el uso de vitaminas antioxidantes y cinc pueden reducir el impacto de DMAE en algunas personas.
Un extenso estudio científico ha determinado que las personas con riesgo de desarrollas estados avanzados de DMAE, pueden reducir dicho riesgo en un 25% a través de un tratamiento que combina vitamina C, vitamina E, beta carotina y Zinc.
Estos suplementos nutritivos aparentan no proveer beneficios entre personas sin DMAE, o en etapas tempranas de desarrollo de DMAE.
Es muy importante recordar que los suplementos vitamínicos no son una cura para la DMAE, ni tampoco restaurarán la visión que ya se ha perdido debido a la enfermedad. Sin embargo, cantidades específicas de estos suplementos juegan un papel importante de ayuda para mantener la visión entre personas con alto riesgo de desarrollar DMAE avanzada. Usted debe hablar con su oftalmólogo para determinar si está en riesgo de desarrollar DMAE avanzada, y para saber si los suplementos vitamínicos son recomendables.
Cirugía con láser y terapia fotodinámica:
Ciertos tipos de DMAE “húmeda” pueden ser tratados mediante cirugía con láser, un procedimiento breve y ambulatorio. La cirugía con láser y otra forma de tratamiento llamada terapia fotodinámica, usa un rayo de luz enfocado para hacer más lenta, o detener la salida de líquido de los vasos sanguíneos que dañan la mácula. Estos procedimientos pueden ayudar a preservar más la visión, pero no son curas que puedan restablecer la visión normal.
Inyecciones intravítreas de antiangiogénicos:
Es el tratamiento actual por excelencia. A pesar de los avances del tratamiento médico, muchas personas con DMAE aún experimentan alguna pérdida de la visión. Para ayudarle a adaptarse a niveles de visión más bajos, su oftalmólogo puede prescribirle aparatos ópticos, enviarlo a un especialista o a un centro para pacientes con visión reducida. También se dispone de una amplia gama de servicios de apoyo y de programas de rehabilitación que ayudan a las personas con DMAE a mantener un estilo de vida satisfactorio.
Debido a que habitualmente la visión lateral no está afectada, la visión que el paciente aún posee es muy útil. Con frecuencia, las personas continúan realizando muchas de sus actividades favoritas mediante el uso de aparatos ópticos tales como lupas, circuitos cerrados de televisión, materiales de lectura escritos en letra grande y aparatos computarizados de voz.
Centro oftalmológico integrado de referencia en Andalucía Sur, como centro especializado en las técnicas más modernas de microcirugía ocular de polo anterior, cirugía retiniana y cirugía refractiva (cirugía de la miopía, hipermetropía y astigmatismo).